Descripción general
Diversos autores han descrito las consecuencias en el desarrollo emocional del niño médicamente enfermo tras una hospitalización o una cirugía; sin embargo, fue hasta los años 70, que se destacó la importancia de preparar psicológicamente al niño antes de someterse a procedimientos médicos, considerando tanto las características del niño y sus padres, como el tipo de enfermedad y tratamiento, con lo que el papel del Psicólogo Clínico dentro de una institución hospitalaria comenzó a destacar.
Considerando lo anterior, delimitar el papel del Psicólogo dentro de una institución hospitalaria resulta de gran importancia, pues el psicólogo como profesional de la salud debe brindar una atención integral tanto al paciente como a la familia, no sólo brindando contención tras la notificación de diagnósticos y cirugías, sino realizando acciones de prevención para los efectos posteriores a la hospitalización.
Así, en el caso de los pacientes pediátricos, el papel del Psicólogo resulta de suma importancia, pues se ha descrito que toda hospitalización, cuando es manejada comprensiva y adecuadamente, puede ser una experiencia de crecimiento positiva. Es decir, cuando se toman en cuenta todos los aspectos bio-psico-sociales del paciente. Así, pensamos y coincidimos con alguinos autores en que existen ocho ejes primordiales, que a continuación se enlistan, para brindar una atención integral a la familia y al niño médicamente enfermo con lo que se pueden disminuir importantemente las consecuencias negativas y no deseables de la hospitalización y la enfermedad crónica en pacientes pediátricos:
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Brindar información. El paciente debe conocer las opciones que existen en la atención y tratamiento a su padecimiento y así, participar en la toma de decisiones; de esta forma, el paciente puede negarse a cualquier propuesta que no le satisfaga, sin que esto derive en el abandono o desinterés del médico.
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Preparación emocional. Es fundamental acompañar a los niños para la hospitalización, cirugía y procedimientos médicos, pues requieren de una explicación precisa y adecuada a la etapa de desarrollo en la que se encuentran ya que esto les facilitará la comprensión y adaptación a la nueva situación que están viviendo.
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Trabajo interdisciplinario. Integrar y compartir con el personal (médicos, psicólogos, enfermeras, especialistas, etc.) el punto de vista del paciente para establecer una comunicación franca y abierta, lo cual promueve un clima favorable para el niño y su familia.
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Adeuación del medio ambiente. Es muy importante que el ambiente hospitalario sea sensible y cálido, para que los niños perciban la menor amenaza posible.
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Educación. Actualmente la educación del paciente respecto a su problemática es indispensable en el tratamiento de las enfermedades, tomándose como el principio de la adaptación y la adherencia terapéutica; y se considera como una herramienta de prevención de primer orden.
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Manejo del dolor. El principal objetivo del abordaje psicológico del dolor es que la experiencia se haga más tolerable para el niño y que perciba una disminución en éste; lo cual se logra dotando al niño de estrategias positivas de afrontamiento, modificando la percepción e interpretación del dolor con lo que se logra la disminución de la ansiedad y el estrés, así como un aumento en la percepción de control, de sentimientos de eficacia y autoestima, de adherencia al tratamiento y de la cooperación con el personal médico.
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Atención a la familia. Una enfermedad no puede separarse del marco familiar y dinámico en el que se desarrolla, lo cual produce cambios en las actitudes hacia el niño enfermo, pues las reacciones de la familia son complejas y diferentes, no sólo de familia a familia, sino en el interior de la misma, ya que cada miembro reacciona no solamente a la enfermedad del niño, sino también frente a las reacciones de los otros miembros.
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Afrontamiento ante la pérdida. Existe la idea que los niños gravemente enfermos no sienten curiosidad por la muerte, que no piensan en ella o que no sienten nada al respecto; sin embargo, se ha visto que incluso niños pequeños sienten temor hacia la muerte y suelen tener fantasías al respecto. Ademas, se sabe que algunos niños se preocupan, tanto por su propio bienestar como por el de sus seres queridos, resultando primordial escuchar y comprender el significado que para cada niño implica su enfermedad.
Objetivo:
Que el profesiona adquiera estrategias para el diseño de intervenciones psicológicas con niños y adolescentes médicamente enfermos, así como a su familia.
Dirigido a:
- Psicólogos clínicos: licenciados, pasantes con el 100% de créditos y estudiantes del último semestre de la carrera de Psicología,
- Licenciados en pedagogía y pasantes con el 100% de créditos y estudiantes del último semestre de la carrera de Pedagogía.
Duración:
El diplomado cubre un total de 252 horas distribuidas en 7 meses.
Inicia el 04 de abril de 2022 y termina el 04 de novembre de 2022.
Modalidad:
Diplomado en línea. Con opción a practicas presenciales.
Instituciones participantes:
Hospital Infantil de México Federico Gómez y Universidad Nacional Autónoma de México. |